31/01/2023 - 08:49 - Madrid (España)
El Girona sacó un punto muy meritorio del Bernabéu porque lo trabajó a conciencia. Jugó bien, con inteligencia, ante un Madrid que gestiona fatal esos partidos que da por descontados. Ante el penúltimo basta con un par de arreones. Pues no. Sobre todo porque cualquiera está expuesto a esa nueva plaga en que se está convirtiendo el videoarbitraje. El penaltito famoso que Medina Cantalejo anunció que no se pitaría facilitó a Stuani el empate. Una mano que se adivina, junto al cuerpo, como tantas otras que se han pitado (o no) esta temporada. Así de aleatorio está el asunto. La decisión de Melero e Iglesias Villanueva estropeó un partido que, por otra parte, mereció acabar como acabó, con empate. Quede claro.
Fuente: Marca.com
Publicado por Alejandro Juncal García
Añadir nuevo comentario